Huy carajo, felizmente te has dado cuenta
Esta expresión la soltó un radiólogo
amigo cuando en aquella oportunidad le mostramos un documento similar a
la noticia que ha aparecido en los medios de comunicación esta mañana
revelando que una anciana de 77 años fue sometida a un examen de
radioimágenes y que en el informe que se entregó a los familiares decía:
vesículas seminales y próstata dentro de los límites normales. (ver enlace)
Una mujer con próstata sin duda que es error de tipeo.
En todas partes se cuecen habas
Tratando de hallar el origen del error,
encontramos que puede ocurrir cuando se sobreescribe sobre un informe
anterior en la misma computadora y ni “la secretaria” ni el especialista
que firma se han percatado de ello.
Que nos cuesta pedir disculpas
Frente a ello lo correcto es pedir
disculpas y repetir el examen sin costo alguno, para que la familia
quede con la certeza que el error ha sido reconocido y se ha procedido a
enmendarlo, de manera que el nuevo examen zanja el problema. ¡Caballero nomás!
Si ello ocurre queda la certeza que el
nuevo informe revela el estado real de la paciente y tal vez lo más
importante que ha habido propósito de enmienda.
Los riesgos de la falta de autocrítica
La soberbia de no reconocer que se
cometió un error puede ser trágico para la organización, porque pueden
ocurrir algunas de las siguientes situaciones:
- Queja ante los directivos de la clínica
- Denuncia ante INDECOPI
En todos los casos se afecta el prestigio del establecimiento y todos pierden.
Etiquetas: Hospital, Sanitarias
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